África tiene su huella en Cuba

Los lazos de amistad entre África y Cuba son sólidos. La historia de ambos pueblos se remonta a 5 siglos atrás, cuando más de un millón de africanos fueron trasladados a América, privados de su libertad y sometidos a la esclavitud.

Desde el lejano continente llegaron con sus costumbres culinarias, religiones, tradiciones, danzas y cantos para fusionarlas con las nuestras, conformándose así la identidad del pueblo cubano.

La solidaridad es también un aspecto que ha servido como puente para tender fuertes lazos de amistad, no sólo por la ayuda que nuestro país brindó a las naciones del continente negro en la lucha contra el colonialismo, el racismo y el apartheid, sino también por el acompañamiento de gobiernos, líderes, organizaciones africanas en la lucha contra el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos, con su voto cada año a favor de la eliminación de esa política hostil.

Debido a las relaciones  históricas, culturales y de cooperación existentes entre la isla y ese continente, la celebración del 25 de mayo, declarado como el Día de África, es ya una fecha que Cuba asume como propia y que forma parte de su cultura.

Cuba se une cada año a la celebración del nacimiento de la Unión Africana (UA) integrada por 54 Estados, organización que aborda de forma colectiva problemáticas que afectan a África como son los conflictos armados, los efectos del cambio climático y la pobreza extrema.

Muchas son las instituciones cubanas que recuerdan y celebran esta importante fecha con la realización de un amplio programa de actividades, tal es el caso del Ministerio de Cultura, la Casa de África, perteneciente a la Oficina del Historiador de la Ciudad, la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), El Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) y el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), por solo mencionar algunos.

Existe también un lugar a cielo abierto que rinde tributo a los líderes de estos pueblos hermanos, protagonistas de las guerras de independencia. Situado en el municipio capitalino de Playa el Parque de los Próceres Africanos es el único de su tipo en el mundo.

Este parque honra la memoria de las principales figuras que consolidaron la libertad de los pueblos africanos, allí se perpetúan en bronce imágenes de líderes que contribuyeron decisivamente en la lucha contra el colonialismo y la unidad de África.

Suman 19 esculturas, algunas creadas en los países de origen del prócer, otras son obra de artistas cubanos, todas poseen la misma dimensión a excepción del monumento a los Héroes de la independencia de Nigeria.

En bustos como el de Modibo Keita (Mali); Omar al-Mukhtar (Libia), Amílcar Cabral (Guinea Bissau) está la impronta del escultor santiaguero Alberto Lezcay, mientras el pinareño Andrés González moldeó los bronces de Marien Ngouabi (Congo), Ahmed Sékou Touré (Guinea), Patricio Lumumba (Congo) y Laurent Désiré Kabila (Congo). La escultura de Nelson Mandela es obra del artista Tomás Vicente.

Los monumentos fueron develados, cada uno en su momento, por dirigentes políticos o gubernamentales de sus naciones de origen. De igual modo, en visitas oficiales de jefes de Estado, ministros y políticos africanos a Cuba, han rendido merecido homenaje a sus héroes con la colocación de ofrendas florales y la realización de actos conmemorativos.